De vez en cuando algún caso nos mueve todo porque encima empieza por una cosa y termina por otra…

Tafí del Valle es uno de los lugares a donde viajo por mi trabajo. Y fue de donde salió este caso, que en un principio arrancó con un pedido de cambio de nombre por un niño. Criado por su tía y su esposo, no entendía por qué no tenía el apellido de sus hermanos. Así que le metí un proceso de cambio de nombre…
Obvio, el tema era más complejo y la jueza Mariana Rey Galindo enderezó el proceso para que el niño pudiese terminar siendo adoptado por aquellos a quienes él consideraba sus padres en esta sentencia.
Este fue un caso mediático como lo atestiguan las notas en la web del Poder Judicial de Tucumán (02/07/19), Infobae (04/07/19), TN (04/07/19), La Gaceta (07/07/19) y Perfil (07/07/19). Obvio, todo fue porque los papás de Pablo lo quisieron así, que, a todo esto, ya debe andar por los 19 años. Me alegra haberme cruzado en su camino y haberlo ayudado un poquito en su vida.